A la hora de armar el plantel, Diego Flores ratificó, en más de una ocasión, que uno de los puntos claves era lograr un mix entre el sentido de pertenencia y experiencia. Para el entrenador, ambos puntos son claves para torneos largos en los que no debe temblar el pulso para no dar por pérdida ninguna pelota. Hoy, a siete fechas del inicio del campeonato, San Martín parece gozarlo. Pero…¿cuántos tucumanos hay en el plantel?
El plantel profesional cuenta con 12 jugadores nacidos en la provincia, es decir, 36% del plantel es originario de la provincia (son 33 integrantes). Si se considera el plantel del 2023 (que contaba con 10 comprovincianos), Juan Imbert fue el único comprovinciano que dejó el plantel. También se debe mencionar a Juan Jaime que, tras la llegada de Franco Herrera, salió de préstamo a Atenas de Río Cuarto, equipo del Federal A. En 2022, la cifra de tucumanos fue de 11, aunque solamente Juan Orellana y Lucas Diarte se posicionaron como inamovibles para Pablo De Muner.
Si bien el número parece llamativo, Gustavo Abregú, Orellana, Pablo Hernández y Gonzalo Rodríguez son las cuatro piezas que más consideración se llevan de “Traductor”.
De todos ellos, Abregú es el único que tuvo participación en todos los partidos del campeonato. Claro, debido a su posición, el volante central es el encargado de la contención del equipo. Si bien empezó el campeonato a los tumbos y sin mostrar la seguridad expuesta en 2023 (en donde fue uno de los mejores de la temporada), el paulistano empezó a levantar su nivel y ser una fija para el DT. Así, acumula 483 minutos en cancha (jugó completamente los últimos dos partidos).
Juan Orellana es el que más minutos acumula. Pese a la expulsión que lo marginó del duelo frente a San Miguel, el defensor lleva 535 minutos en seis partidos. Es más, nunca salió como cambio. Eso sí, todavía sigue alternando entre buenos y malos rendimientos, aunque sacó a relucir su mejor nivel con la línea de tres. Así, junto a Agustín Dattola y Diego Mastrángelo son los dos grandes caudillos de la defensa.
Ambos integraron los últimos planteles en los que San Martín se quedó a las puertas del gran objetivo. Sin embargo, “Traductor” obtuvo la experiencia necesaria con la inclusión de “Turbo” y Hernández. Pese a no portar la cinta de capitán (la lleva Darío Sand), ambos son verdaderas voces de mandos para los más jóvenes. Tal es así que en más de una imagen se los vio fuera del campo de juego intentando generar un lazo con los surgidos de inferiores.
Hoy, “Tucu” es uno de los pilares del medio campo. Luego de la puesta a punto (motivo por el que no fue convocado a las tres primeras fechas), empezó a sumar minutos y tomó la voz de mando después de las dos derrotas consecutivas frente a Ferro y San Miguel. Dentro del campo de juego, se posicionó como uno de los baluarte de la mitad de la cancha. Claridad y pases filtrados son el aporte de Hernández para el juego de San Martín. Así, es uno de los inamovibles de Flores.
Rodríguez, en tanto, sigue en búsqueda de su lugar dentro del “11”. Actualmente, es el primer cambio de Flores y se posiciona como el revulsivo del equipo. Ya acumula dos asistencias en tres partidos jugados por lo que su presencia en el ataque es sinónimo de peligro. En relación a su rol como líder, “Turbo” es uno de los grandes ídolos de la institución. Sus goles en las finales de los ascensos lo ponen como una figura de referencia por lo que es otro de los experimentados en San Martín.
Mauro Verón, Nicolás Moreno y Ulises Vera también tuvieron su participación en este torneo. Es más, “Chuny” marcó un gol en el último partido tras recibir una asistencia de Rodríguez. Sí, un gol made in San Martín. Sin embargo, ninguno se ganó un lugar fijo y sus presencias son esporádicas en el campo de juego. Guillermo Rodríguez, Agustín Prokop, Nicolás Carrizo, Tomás García, Alan Cisnero, Gonzalo Gutiérrez son los nombres que continúan a la espera de sumar minutos en el torneo.
A esta lista también se podría sumar a Tiago Peñalba. Si bien el juvenil nació en Salta, el defensor se forjó en la cantera del club y también tuvo su participación en el certamen: jugó dos partidos como titular (en ambos fue reemplazado) y estuvo tres veces en el campo. Como dato de color, en los minutos en cancha fue reconvertido a la posición de lateral derecho.
Todo esto deja a las claras que San Martín encontró ciertos nombres que mantienen la esencia del club. Sin embargo, deberá continuar en búsqueda de la identidad tanto dentro como fuera del campo.